Análisis | ¿Crisis? ¿Qué crisis? (Situación actual de Los Angeles Lakers)

En Los Angeles, y más en las medianias del Staples Center, la tensión es continua. No hay tiempo para relajarse. Sólo vale ganar, y el anillo está en la cabeza de todo aquel que tiñe su camiseta de dorado y morado. Tres derrotas consecutivas es delito con sanción de críticas nunca constructivas y negativismo a expuertas. Quien lo diría, en una franquicia acostumbrada a ganar.

En los últimos partidos Bryant no se encuentra tan solo
y eso el equipo lo nota en los resultados (Yahoo)

Para paliar estas críticas de mediados del mes de febrero los jugadores de Lakers, con Phil Jackson seguro de por medio, han puesto medidas. Han querido demostrar que son los máximos candidatos al título y que son un conjunto experimentado y contrastado con las miras puestas en ponerse el tercer anillo consecutivo en la mano.

El pivot ha de ser determinante
en los últimos partidos de liga (Yahoo)

La derrota ante Cleveland fue el punto de inflexión. Donde el roster angelino dijo: "Hasta aquí". Desde entonces siete victorias consecutivas con rivales del nivel de San Antonio, Oklahoma o Portland de por medio. Un Kobe Bryant reconvertido, lo hace todas las temporadas, en un jugador menos egoísta y un Pau Gasol a un gran nivel. Mientras tanto, antes de anoche reaparecía Barnes, otra pieza más para ser más dificiles de ganar. El alero se complementará con Artest para ser el stopper necesario para parar a los hombres desequilibrantes en la hora de la verdad.

Una de las piezas claves, además de los dos All-Star del equipo, ha sido la vuelta de Bynum para ser el pivot que todos conocen y los aficionados esperan. Ese que es determinante bajos los aros con un gran acierto en la pintura contraria y compromiso reboteador en la propia. Esta mejora en el poste bajo, que se añade a los polivalentes Odom y Gasol, hace que el equipo contrario tenga que pensar también como para a otro peligro más.

Unos Lakers menos previsibles, con un juego más coral y con el siempre determinante Kobe Bryant se postulan no sólo como el rival a batir si no también como un equipo enrrabietado y con ganas de demostrar que cuando empiecen los Playoff llegará su momento.