Los Clippers han preferido meter el dinero debajo del colchón en vez de mostrarlo y abanicarse con un fajo de billetes como ha hecho su vecino con los fichajes de Howard y Nash. Por su parte, los de Vinny Del Negro han preferido encontrar piezas para fortalecer su banquillo para ser candidatos a todo.
La temporada pasada, los Clippers eran uno de los equipos que tenían todos los ojos de los aficionados sobre ellos. El movimiento de Chris Paul durante el lockout y la 'bestia parda' de Griffin como arma ofensiva prometía al menos espectáculo.
Sin embargo, la lesión de Billups y el bajo rendimiento e irregularidad de alguno de sus hombres hizo que la cenicienta que se iba a convertir en princesa se quedase lejos de la corona. A pesar de esto, la llegada de tres hombres de experiencia acostumbrados a jugar playoff puede ayudar a la franquicia californiana a volver a tener aspiraciones.
No lo tendrán nada fácil. Los movimientos de Lakers, la juventud de los Thunder y la eterna edad dorada de los Spurs estarán al acecho al igual que los reforzados Mavs y los guerreros osos de Memphis.
Aquí es donde entran los viejos conocidos. Tres jugadores capaces de anotar con facilidad desde múltiples posiciones y que, además de esto, no les temblará las manos a la hora de jugar finales apretados.
Estamos de acuerdo en que Odom no es el de Lakers. O al menos no lo fue en su paso por Dallas Mavericks. Sin embargo, a poco que se acerque a los números, y relevancia en el juego, que tenía en el equipo vecino puede dar muchas posibilidades al juego de los de Del Negro. Ya sea en su posición natural, de alero, o en la impuesta, aceptada y adaptada de ala pivot, el de Rhode Island aportará sus infinitos recursos ofensivos para bien de los Clippers. La vuelta de Odom al equipo donde comenzó a demostrar su nivel y mostró que es uno de los jugadores altos que mejor ponen el balón en la pista.
Por su parte, Grant Hill llega para disfrutar su último contrato como profesional -si no fuese así los científicos más importantes del mundo deberían estudiar su genética-. Tras temporadas más que solventes en los Suns, llega a los Clippers con el compromiso de ser un pegamento en el vestuario y un jugador de garantías en los minutos destinados para el veterano. Dará caché y experiencia a un proyecto, y un equipo, que nunca tuvo estos calificativos.
Por último el pistolero Jamal Crawford llega para ser el sexto hombre de una franquicia necesitada de puntos desde el banquillo. Sus 13,9 tantos por encuentro en Portland demuestran su capacidad para aportar anotación juegue los minutos que juegue. Viendo el roster de los Clippers, Crawford deberá esperar a los primeros partidos para ver cual es su verdadero rol, pero su papel de sexto hombre consagrado le destina a ser el microondas que todo equipo ganador necesita.
Los vuelos de Griffin y la magia de Paul no serán las únicas atracciones para comprar una entrada para ver a los Clippers. Los viejos rockeros llegan para ser las joyas guardadas con mimo para mostrar en los mejores momentos.
2 comentarios:
Unos fichajes muy inteligentes todos ellos. La cabeza de Hill, la versatilidad de Odom y la energía de Crawford deberían casar bien con lo que ya tienen los Clippers.
Muy buen análisis, les veo con opciones de quedar entre los 3-4 primeros del oeste. Pese a ello creo que su pega mas importante es el center. DeAndre ya demostró el año pasado su mediocridad en playoffs, hasta Reggie Evans acabó jugando mas que el. Además Griffin pese a su espectacularidad es menos bueno de lo que aparenta y la gente piensa.
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